¿Sabes por qué la forma de las hojas de las palmeras, partidas dando lugar a multitud de hojitas, es diferente a la de otras hojas? Las hojas segmentadas no es un capricho de la naturaleza sino una adaptación al clima cálido de donde provienen y la explicación es muy curiosa: Las plantas, al igual que los humanos, tienen una temperatura de confort. Como las plantas no pueden regular la temperatura por sí mismas, necesitan aprovecharse del entorno para refrigerarse. ¿Cómo lo hacen?

El aire que se encuentra encima de la superficie de la hoja de la palmera, está más caliente que el que hay debajo, ya que sobre la hoja inciden los rayos solares. Al calentarse, el aire asciende, dejando un hueco que tiene que ser inmediatamente reemplazado por el aire más frío que está debajo. Si en lugar de estar segmentada, la hoja fuera una superficie continua y única, solo se podría reemplazar el aire frío por el caliente en el borde de la hoja. En cambio, al tener la hoja segmentada en finas hojitas alargadas, la planta reduce la distancia que el aire frío debe recorrer para refrigerar su hoja, y así puede cubrir toda su superficie rápidamente. Con este diseño, la palmera consigue mover el aire ¡sin necesidad de usar un ventilador! Es decir, utiliza un sistema de refrigeración pasivo.

Por tanto, las hojas de las palmeras que vemos en el Umbracle responden a un peculiar sistema de refrigeración pasiva Estas son algunas de las curiosidades que el visitante puede aprender en su visita al Umbracle, gracias al acuerdo de colaboración entre la Ciudad de las Artes y las Ciencias y la empresa Biomimetiks para divulgar el conocimiento de la biomimética, en especial entre los estudiantes.

'Copiando a la naturaleza'

La biomimética es una disciplina que se inspira en los diseños, procesos y sistemas naturales para desarrollar soluciones innovadoras en campos como la arquitectura o la ingeniería.  Bajo el lema ‘Copiando a la naturaleza’, a través de fichas educativas se muestran diferentes ejemplos que ofrece la naturaleza y que el visitante puede comprobar en el propio complejo, mientras recorre el Umbracle, un paseo que está rodeado por 99 palmeras y 62 naranjos amargos, entre otras especies y variedades de arbustos de la Comunidad Valenciana. Las primeras fichas educativas que se han realizado giran en torno al Umbracle y responden a las preguntas antes citadas sobre las palmeras y los naranjos.

Las fichas ofrecen un aspecto, hecho o razonamiento de la naturaleza y su aplicación biomimética, así como una propuesta de actividad que demuestra la anterior explicación. Los visitantes y el colectivo escolar pueden acceder a estas fichas en la sección de didáctica de la página web de la Ciudad de las Artes y las Ciencias.